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Presiones de Israel y EEUU a la Corte Penal Internacional por la Guerra de Gaza
Israel y Estados Unidos expresaron su preocupación y oposición en relación a una posible investigación por parte de la Corte Penal Internacional (CPI) sobre supuestos crímenes cometidos por Israel durante la guerra en la Franja de Gaza. Ambos países advirtieron sobre la emisión de órdenes de arresto internacionales contra el primer ministro Benjamin Netanyahu y otros altos funcionarios y jefes militares.
El premier Netanyahu, en un discurso grabado, afirmó que el tribunal no tiene jurisdicción sobre el Estado de Israel y calificó cualquier posible orden de arresto como un escándalo histórico. Por su parte, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, manifestó que Estados Unidos no apoya ni cree en la jurisdicción de la CPI y se opone a una investigación de ese tribunal internacional.
Según informes, el diario The New York Times señala que Netanyahu podría estar entre los acusados, mientras que fuentes del gobierno israelí citadas por el diario Haaretz anticipan que las órdenes de arresto podrían extenderse a otros altos funcionarios como el ministro de Defensa, Yoav Gallant, y el jefe del Ejército, Herzl Halevi.
La CPI, cuya creación tuvo lugar hace más de una década, tiene como objetivo combatir la impunidad por crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad, genocidio y otros delitos graves. Sin embargo, depende de los Estados miembro para llevar a cabo las detenciones de los sospechosos, ya que no cuenta con una fuerza policial propia.
Actualmente, la CPI tiene 17 investigaciones en curso y ha emitido 42 órdenes de arresto, deteniendo a 21 sospechosos. A pesar de haber sido criticada en sus primeros años por enfocarse principalmente en crímenes cometidos en África, la corte ha ampliado su alcance, abriendo casos en Asia, Europa, Oriente Medio y Latinoamérica.
Israel, Estados Unidos, Rusia y China son países que no forman parte del tratado conocido como el Estatuto de Roma, que estableció la CPI. Estos países no aceptan la jurisdicción del tribunal y no han adherido al documento.
El gobierno israelí ha manifestado rotundamente su rechazo a cualquier investigación de la CPI, calificándola de indignante e intento de socavar el derecho de autodefensa de Israel. El ministro de Relaciones Exteriores, Israel Katz, ha declarado que su país no se dejará disuadir por amenazas legales y que la emisión de órdenes de arresto solo favorecería a Hamás y al eje del islam radical liderado por Irán.
En más de 200 días de guerra israelí en la Franja de Gaza, iniciada tras un brutal ataque de Hamas que causó 1200 muertos y el secuestro de 240 personas, el número oficial de muertos supera ya los 34.500, el 75 % mujeres y niños, según el Gobierno gazatí. La ONU acusó a Israel a mediados de marzo estar cometiendo un crimen de guerra en el enclave al privar a la población civil de alimentos, mientras que otras organizaciones como Amnistía Internacional denunciaron el bombardeo “indiscriminado” contra la población civil.
