Una familia de esta capital sufrió un tormentoso fin de semana cuando una banda de delincuentes le ingresó a su chacra, ubicada en el Camino 23 Parcela A255.

Minutos antes de las 21 de este sábado, ingresaron seis personas con armas de fuego y con chalecos antibalas, haciéndose pasar por policías.

Los delincuentes irrumpieron en la vivienda familiar cuando se encontraban el dueño de 67 años y sus hijos de 42 y de 31.

Los damnificados contaron en sede policial que entraron al grito de ser oficiales de la fuerza, que obligaron al dueño de la propiedad a descender de su vehículo y luego se metieron a la casa.

Una vez en la vivienda, ataron a las tres víctimas y sustrajeron la suma de un millón y medio de pesos, un arma 9 milímetros Bersa, un máuser 308 con mira, dos televisores de 43 pulgadas, otros dos de 32 pulgadas y un láser nivelador de campo que les pareció que podría ser caro.

Seguidamente, huyeron por la Ruta 3 en un Toyota Corolla de color beige, propiedad de los asaltados, que todavía no fue localizado.

La fiscal Paula De Luque tomó intervención en el caso e impartió las primeras diligencias, entre ellas las labores del Gabinete de Criminalística y del Cuerpo de Investigaciones Judiciales.

Debido a la modalidad del robo, que llevó una gran logística previa, y que el rodado no quedó abandonado en ningún lugar, se sospecha que los malvivientes podrían ser de Buenos Aires y que llegaron hasta esta zona por un entregador.